Comentario del libro “Iluminaciones freudianas”, de José Milmaniene.

Por Martín Uranga

Jose Milmaniene

Editorial Biblos. Buenos Aires. 2014. 160 páginas

Milmaniene nos propone, no sólo pensar al psicoanálisis como ejercicio po(ético), sino recrear poéticamente al psicoanálisis mismo. Es como si advirtiera, a través de un gesto radical consecuente con la reafirmación de la dimensión de poieisis del análisis, que es necesario metaforizar poéticamente los fundamentos y categorías mismos del psicoanálisis, dejando en evidencia, de este modo, que el propio discurso freudiano no es sino una poesía que invita a una reinvención escrituraria permanente, sustentable en acto, si y sólo si, a través de la consideración irrecusable de la rigurosidad ética y científica que lo

Si la sociedad de consumo, al atentar en su afán realístico de goce contra las ficciones simbólicas esenciales, promueve la destitución de las identidades narrativas que constituyen el soporte de la subjetividad, no es sino a partir del realce de su praxis poética así como desde la recreación alegórica  de sus coordenadas esenciales de intervención y de sus fundamentos, que el psicoanálisis podrá  instituirse como discurso de resistencia respecto de la posmodernidad  signada por la perversión generalizada.  Éste es el desafío que encara José Milmaniene en su último libro Iluminaciones freudianas. El psicoanálisis en la sociedad de consumo. Así, en continuidad con  el gesto freudiano esencial que funda el anudamiento indisociable entre psicoanálisis y poesía  (Edipo, Narciso, Moisés, etc), el autor nos convoca a sostener creativamente la impronta ética de una poiesis que se torna cada vez más indispensable en tiempos de la “clínica del anti-amor.”

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Iluminaciones freudianas, el psicoanálisis en la sociedad de consumo

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La sociedad de consumo se caracteriza por la declinación del Padre de la Ley, por la supresión de la dimensión de la falta y por la exclusión de las cosas del amor.

En consecuencia, los psicoanalistas debemos enfrentarnos con un discurso anómico – dado que se carece de códigos normativos sociosimbólicos claros, que operen como eje de referencia fálico, para ordenar los valores, instalar los límites e inscribir al sujeto en la Ley; nihilista, dado que se han devaluado las prácticas sublimatorias, de modo que    la creencia en la trascendencia del lenguaje y la potencia del Verbo han sido desplazadas por los goces pulsionales obscenos; y amoral, dado que la ética de la diferencia y el acogimiento hospitalario y responsable de la alteridad, han sido reemplazados por la exaltación maníaca de la mismidad del narcisismo.

La política del psicoanálisis –hacer consciente lo inconsciente- supone un acto de confrontación radical con la sociedad de consumo, dado que ésta exalta a la desmentida como su mecanismo defensivo fundamental: la experiencia del amor es desmentida por el encuentro fetichístico de los cuerpos cosificados ; la experiencia del saber por el mero incremento la información; la experiencia de la producción por la acumulación de capital; la experiencia del aprendizaje por la conquista de un título; la experiencia del placer por la posesión exagerada de objetos; la experiencia del arte por el coleccionismo; la experiencia del encuentro dialógico por la exaltación del solipsismo; la experiencia de la riqueza espiritual por la narcosis del ocio improductivo; la experiencia de la comunión social por la introversión; la experiencia del don por el egoísmo; la experiencia de la ética por la moral de circunstancias.

De modo que, si bien la industria cultural se ha apoderado del escenario socio-histórico y ha arrojado a los sujetos al circuito del consumo como si fueran mercancías, debemos considerar no sólo   el todo de un territorio mercantil, que no deja márgenes ni bordes exteriores a la masificación comercial que ha propuesto, sino que debemos también prestar atención a los espacios intersticiales y las aberturas en los que destellan las luces que irradian los discursos de resistencia a la pulsión de muerte , sean   poéticos, políticos y/o psicoanalíticos

 

 

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